Durante los últimos seis años, un equipo de investigadores médicos y de ingenieríade la Universidad McMaster de Canadá, que incluia colegas de Estados Unidos, Australia y Argentina, ha estado trabajando para desbloquear una pieza importante del rompecabezas en la búsqueda de una cura para la celiaquía.
Hasta la fecha se creía que la respuesta inflamatoria al gluten se producía en el interior de la pared intestinal y que involucraba exclusivamente a las células inmunitarias. Sin embargo, en un nuevo artículo publicado en la revista Gastroenterology, este equipo de cientificos ha revelado que hay más en esta historia, y descubrieron que el revestimiento interno del intestino superior llamado epitelio, compuesto por una variedad de células que clásicamente no forman parte del sistema inmunológico, también un papel activo en la dirección de la respuesta inflamatoria al gluten.
Utilizando biomateriales microscópicos en el laboratorio, el equipo creó un modelo biológicamente funcional del epitelio intestinal que permitió a los investigadores aislar los efectos de moléculas específicas en las células epiteliales de personas con enfermedad celíaca.
El modelo permitió a los investigadores generar y observar las reacciones en condiciones controladas, una opción que no está disponible en los entornos intestinales extremadamente complejos de los seres vivos. De esta manera, pudieron observar cómo las moléculas alertan a las células inmunes de la presencia de gluten, y concluir definitivamente que el epitelio juega un papel crucial en la activación del sistema inmune en la enfermedad celíaca.
Con anterioridad se había postulado un mecanismo de este tipo, pero nunca se había demostrado. Ahora se espera que la respuesta a esta controvertida pregunta permita avanzar en el desarrollo de nuevos fármacos.
Según ha afirmado Elena Verdu, coautora del artículo, profesora de gastroenterología y directora del Instituto de Investigación de Salud Digestiva Familiar Farncombe de McMaster, “la única forma de tratar la enfermedad celíaca en la actualidad es eliminando por completo el gluten de la dieta. Es algo difícil de hacer y los expertos coinciden en que una dieta sin gluten es insuficiente”.
Localizar con precisión la chispa que desencadena la respuesta inmune, podría estimular la investigación sobre la administración de fármacos para inhibir esta nueva función del epitelio, utilizando medicamentos que ya se encuentran en ensayos clínicos, afirma Verdu.
En este sentido, Tohid Didar, coautor del artículo y profesor asociado en la Escuela de Ingeniería Biomédica de McMaster, y que ocupa la Cátedra de Investigación de Canadá en Nanobiomateriales, ha indicado que “esto nos permitió delimitar la causa y el efecto específicos y demostrar exactamente si la reacción tiene lugar y cómo”.,
Otro hallazgo significativo del estudio es que después de detectar el gluten, el epitelio envía señales más fuertes a las células inmunes si también hay patógenos presentes, lo que significa que en el futuro podría ser posible detectar el patógeno en una persona con riesgo de desarrollar la enfermedad, e inhibir las interacciones con el gluten y el epitelio intestinal para prevenir la enfermedad.