Arca do Millo es un obrador de panadería y pastelería 100 % sin gluten y artesano, donde habitantes i visitantes de Coruña pueden encontrar además de productos sin gluten, otros veganos y sin azúcar, y todos ellos elaborados con el mayor cuidado, para garantizar una calidad y un sabor excepcionales.
En este establecimiento coruñés apuestan por el trabajo artesano hecho con cariño. Coral Pereiro, su fundadora, fue diagnosticada como celíaca cuando tenía 21 años, y en esa época se encontro con era muy complicado encontrar oproductos artesanos y sin gluten de calidad. En 2014 estudió panadería en el instituto Fragas do Eume, en Pontedeume, y poco después se formó en industrias alimentarias.
Desde entonces Coral tenía una idea clara: «quería estudiar y aprender a cocinar con gluten para despues transformar esas recetas en sin gluten». En el 2022, Coral fue madre, y fue ahí cuando decidió dar forma al proyecto que llevaba tanto tiempo en su cabeza: un obrador 100 % artesanal y sin gluten.
Encontró el local perfecto un año más tarde, y tras un largo período de obras, acaba de estrenar su Arca do millo, su ansiado obrador de panadería y pastelería 100 % sin gluten.
Abrió justo a tiempo para la campaña de Navidad y cuenta que la acogida fue muy buena: "enseguida se corrió la voz, y estamos muy contentos", cuenta al diario local La Voz de Galicia.
Su idea es que haya postres típicos estacionales: filloas y orejas en Carnavales o huevos de Pascua en Semana Santa. Tanto la pastelería como la panadería son dos de sus especialidades, por lo que todo lo elaboran fresco y de forma artesana en el obrador que se encuentra al fondo del local.
Coral destaca en su establecimiento las empanadas, uno de sus productos estrella, afirmandotelo que «las hacemos con masa gramada, al estilo gallego».
Su objetivo es que cualquier persona pueda disfrutar del pan, la bollería o los productos de pastelería aunque no tomen gluten, o dicho de otro modo, «que la gente pueda comer sin gluten sin que se note la diferencia con otros produtos que si lo llevan».
En la reforma del local puso mucho esfuerzo, de manera que el obrador está lleno de muebles antiguos restaurados por la propia Coral y por su pareja David. Destaca una quesera holandesa y un antiguo mostrador de una mercería reconvertida ahora en expositor para la bollería que cocina el equipo de Arca do millo. También una antigua mesa de una tienda de ultramarinos con cien años de historia, y hasta la antigua mesa original de la casa familiar de Coral.
Además, en las paredes pueden verse algunas de las esculturas del padre de Coral, el artista Álvaro Pereiro, que le hizo un regalo muy especial a su hija: un grabado con el nombre de la puerta en la entrada del obrador.
La idea de esta emprendedora es seguir dándole el toque especial a este espacio con un escaparate cambiante en el que recreará distintas situaciones con pequeñas piezas de Playmobil.
