Un grupo de científicos de la Universidad de Granada (UGR) ha identificado los detergentes de enzimas como los más eficientes para limpiar definitivamente sustancias nocivas como el gluten, a la vez que son menos agresivos con las superficies en las que se aplican.
El equipo de investigadores de la UGR ha analizado nuevos productos detergentes basados en enzimas para eliminar gluten, pero también alérgenos de leche o huevo, de superficies que están en contacto con los alimentos.
Este avance supone un paso significativo dentro del sector de la limpieza, ya que se puede prevenir y reducir la contaminación cruzada de estos alérgenos, mejorando la protección de los consumidores frente a la aparición de alergias alimentarias.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista Food Control, ha sido realizado en el Departamento de Ingeniería Química de la Facultad de Ciencias de la UGR por las estudiantes Carmen Entrenas, del Máster Universitario en Avances en Calidad y Tecnología Alimentaria, y Maylis Martin, del Institut National des Sciences Appliquées INSA de Rouen, Normandie, junto a los docentes Francisco Ríos, Mercedes Fernández Serrano y José M. Vicaria.
La investigación ha evaluado la eficacia de formulaciones detergentes que combinan tensioactivos con enzimas, como proteasas y amilasas, con el objetivo de eliminar residuos que contienen alérgenos de gluten, proteínas de huevo y leche.
Los resultados muestran que las soluciones con enzimas, especialmente las que contienen proteasas, mejoran significativamente la eliminación de alérgenos, en comparación con detergentes convencionales.
El acero inoxidable es la superficie donde se han logrado los mejores resultados, reduciendo la cantidad de alérgenos en un 99,73 % al emplear una combinación de proteasa y amilasa.
Estos hallazgos tienen importantes aplicaciones prácticas para la industria alimentaria, la restauración y el uso doméstico, ya que el empleo de detergentes enzimáticos permite reducir la temperatura y el uso de productos químicos agresivos en los procesos de limpieza, contribuyendo a reducir el impacto ambiental y a mejorar la seguridad alimentaria.
El trabajo ha sido financiado por la Junta de Andalucía, a través del FEDER Andalicía 2014-2020, los Proyectos de Investigación Precompetitivos de la UGR y el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.