El Mercado de San Gonzalo, en el barrio sevillano trianero de León, alberga un pequeño puesto que nunca está vacío y que a cambio presenta siempre cola... y todo para comprar un cucurucho de chicharrones sin gluten, que causan sensacion entre sus clientes, ya sean celíacos o no.
Y es que, aunque pueda parecer mentira, existe un barrio en Triana donde los vecinos se conocen, donde el ruido de las maletas no es la banda sonora de cada día en la capital sevillana, y donde comer no cuesta medio sueldo y, además, se puede hacer sin límite de tiempo.
Las calesitas dan la bienvenida a este mercado de toda la vida, donde un azulejo de la Virgen de la Salud deja claro que estamos en el Mercado de San Gonzalo o, lo que es lo mismo, en el barrio León. Allí los puestos son los de toda la vida, y entre ellos, llama la atención un pequeño puesto que nunca está vacío y cuya cola, si te despistas, aumenta en cuestión de segundos.
Y no es para menos, porque un cartucho de chicharrones fritos siempre es apetecible. Hace tres años abrió sus puertas de la mano de Ricardo, un fotógrafo y cocinero que cada vez que quería comprar o comer chicharrones nunca encontraba algunos que fueran de su gusto.
Beatriz, la cocinera que prepara cada día este manjar comenta que “hemos buscado una fórmula de especias sin gluten, sin lactosa y sin sal, pero que a la vez hacen que no se pierda nada. Es un chicharrón de muy buena calidad”.
Con todo, uno de los secretos es que se sirven recién hechos. En este sentido, Beatriz explica que “los clientes no estaban acostumbrados a comérselos calentitos y eso les llama la atención”.
Si bien es cierto que en Sevilla está más extendido el chicharrón al corte, este puesto ha conseguido que el frito también dé que hablar. Y no es para menos, porque tienen un buen trabajo. “Nosotros los hacemos en su propio jugo, en la propia manteca blanca. Cada vez que hago chicharrones saco manteca blanca, que la calentamos como si fuera aceite. El chicharrón pierde un 60 % de grasa porque en vez de absorberla, la escupe”, afirman orgullosos desde este puesto.