Un reciente estudio ha propuesto una posible terapia para la celiaquía basada en la edición de unas células llamadas T reguladoras o Tregs, que han demostrado que una vez modificadas, pueden frenar la activación y migración de las células T efectoras al intestino, en modelos de ratón.

 

Hace algunos años ya se exploraron estrategias de tolerancia al gluten, similares a la inmunoterapia que se utiliza para tratar la alergia. La idea se basa en que las células B y T reguladoras limiten la respuesta de las células T efectoras, responsables de la destrucción del tejido intestinal.

La novedad de este estudio es que modifican las Tregs de forma específica frente al gluten para que funcionen mejor, demostrando que una vez modificadas podrían llegar a frenar la activación y migración de las células T efectoras al intestino, en modelos de ratón.

Aunque parece prometedor, este estudio cuenta con algunas limitaciones, como quie solo se estudia la acción de las Tregs frente a la gliadina, proteína del trigo, motivo por el que, en un futuro, debería estudiarse si funcionan frente a proteínas de la cebada y el centeno.

Además, el estudio no determina cuándo se deben usar las Tregs como terapia, si antes de desarrollar la enfermedad, o una vez diagnosticada.

Por otra parte, destaca el ehcoi de que los ratones usados no son celíacos, por lo que el gluten no daña su intestino, y solo se les ofrece una vez; de manera que no se puede estudiar el efecto del gluten a largo plazo.

Además, ya se conoce por otros estudios anteriores que el número de Tregs es limitado en pacientes celíacos y, en algunos casos, se ha observado que no son funcionales.

Aun así, este nuevo estudio muestra el potencial de las Tregs modificadas para tratar la celiaquía y ayuda a entender mejor esta enfermedad y seguir buscando alternativas a la dieta sin gluten.

Vídeos

More Videos
Watch the video

Productos

Restaurantes

Empresas

Investigación

Organizaciones

More Articles

Instituciones