La Casa Rural Vilaboa, situada en la localidad gallega de Allariz, en la provincia de Ourense, cuenta con un espléndido y cálido restaurante bien provisto gracias a una muy surtida carta, en la que pueden encontrarse numerosos platos aptos para celíacos.

El cocido es uno de estos platos aptos para quienes padecen esta dolencia, pero este espacio rural de ensueño ofrece además otros menús, a hora de la comida o de la cena, para grupos de tres o más personas, y siempre con opciones para aquellas personas que no pueden tomar gluten.

El cocido comienza con una sopa de primer plato para entonar el estómago y prepararlo para lo que viene después: patata, repollo de verdura, garbanzos, carne de ternera, lacón, chorizos de carne y de cebolla, tocino, morro, cachucha, oreja... no falta de nada. No lleva ni pollo ni gallina porque es un ingrediente que no se emplea en los cocidos de la provincia de Ourense.

Las fuentes tienen generosa porción de todos los elementos, y el servicio, que es muy atento, se preocupa de que si las fuentes se enfrían, repone con viandas calientes hasta que el cliente queda satisfecho.

El postre tiene varias opciones, desde el queso con membrillo, flan, tarta...  y el precio incluye un vino Mencía o cualquier otra bebida.

Se trata de un servicio impecable en un lugar acogedor, con un cocido que se come con mucho agrado y con productos de primera y una relación calidad/precio muy buena. Si a todo esto destacamos su apuesta por los celíacos, estamos ante uno de esos lugares en el que los celíacos deben reservar habitación a la hora de plantearse viajar a un destino rural en Galicia.