Pescaíto frito sin gluten y mariscos, que por definición tampoco contienen este ingrediente, integran la oferta gastronómica de Freiduría Bahía, un espacio abierto recientemente en el centro de Sevilla, que ofrece la opción de llevar a casa, tomar in situ o pedir a domicilio una gran variedad de productos del mar.
Al frente de la cocina se encuentra Rafael Reyes, que cuenta con una dilatada experiencia en la materia, ya que desde pequeño ha visto a su abuelo y a su padre freír pescado en la Freiduría Sevillana de San Jacinto, que cerró en 2016.
Chocos, puntillitas, merluza, huevas, salmonetes o acedías, todo ello elaborado sin gluten, forman parte de su repertorio de pescado frito, aunque sin duda es el adobo el que más fama tiene entre su público. Aunque “ya lo era en la calle San Jacinto”, matiza Rafael.
También el pollo frito que elabora tiene gran demanda, sin quitarle mérito a los boquerones, las gambas fritas, las pijotas o los calamares, productos que se encuentrarn entre las especialidades de la casa, elaborados todos ellos libres de gluten, por lo que son aptos para celíacos, y servidos en cuartos de kilo.
Además de los fritos, también ofrecen mariscos que cuecen ellos mismos, tales como gambas, bocas y patas rusas o langostinos tigre.