Un nuevo estudio desarrollado en Noruega ha asociado una mayor prevalencia de infecciones por enterovirus con la enfermedad celíaca, concluyendo que los niños que habían padecido este tipo de infecciones antes de padecer la enfermedad celiaca eran mucho más susceptibles de desarrollar la celiaquía en los años posteriores.
En el estudio publicado por los investigadores Christian R. Kahrs, German Tapia, Lars C. Stene, Knut E. A. Lundin del Østfold Hospital Trust, de la Universidad de Oslo, el Hospital Universitario de Oslo y el Instituto de Salud Público de Oslo, entre los años 2001 y 2007, los científicos siguieron de cerca a 220 niños noruegos que tenían los genes HLA DQ2 y DQ8.
Los científicos necesitaban que los niños analizados fueran portadores de estos fragmentos de código genético porque la inmensa mayoría de las personas que sufren la enfermedad celiaca son portadoras de al menos uno de ellos.
Además, los investigadores descubrieron, aunque los objetivos de su estudio no estaban relacionados con esto, que también son genes muy comunes en aquellas personas que padecen diabetes tipo 2.
Tras haber seleccionado el grupo de estudio, los investigadores empezaron a recolectar muestras, tanto de sangre como de heces, para detectar los virus o anticuerpos que tenían, lo que demostraría su exposición anterior a estos microorganismos.
Siguieron estudiando el desarrollo de esos 220 niños hasta el año 2016; y de ellos, a 25 se les diagnosticó enfermedad celíaca a lo largo de los años. Fue entonces cuando los científicos descubrieron que los niños que habían padecido infecciones por enterovirus antes de padecer enfermedad celíaca eran mucho más susceptibles de desarrollarla en los años posteriores.
Para asegurarse de que existía una relación de causalidad, excluyeron los casos en los que los pacientes habían sufrido la infección por enterovirus antes de haberlos introducido al gluten, y solo aceptaron casos en los que la consecución de los hechos fuera que el niño fuera sano, con introducción al gluten con total normalidad, con infección por enterovirus, y con aparición de la enfermedad celiaca.
Esto les permitía establecer como detonante, aunque las causas siguen sin estar demasiado claras, la infección por el citado microorganismo.
Los propios investigadores han esplicado la relevancia de sus hallazgos destacando que "descubrimos que una mayor prevalencia de infecciones por enterovirus está asociada a la enfermedad celiaca", aunque aclarando también que "es un estudio limitado y hacen falta otros que ayuden a establecer conclusiones con respecto a la causalidad".