Un celíaco ha tenido a medio mundo pendiente de su brazo. Se trata de Drew Brees, jugador que figura como quarterback del equipo de fútbol americano New Orleans Saints, que ganó al Indianapolis Colts en la XLIV Super Bowl en Miami. Aunque salían como perdedores en las apuestas y estuvieron abajo en el marcador 0-10, los Saints dominaron por completo en la segunda parte con el "mariscal de campo" Drew Brees convertido en el gran líder que ha dirigido a la perfección el ataque y la defensa de los nuevos campeones. La plaza de quarterback o lanzador es la piedra angular del ataque de un equipo de fútbol americano. Aunque es el entrenador quien planea las estrategias, una vez en el campo él es quien decide dónde, cuándo y a quién lanzar el balón, si la jugada es de carrera o de recepción y a qué ritmo desplegar la ofensiva. Un quarterback debe ser alto para tener visión panorámica de sus compañeros, tener un brazo potente para enviar pases rápidos y precisos, y ser corpulento para aguantar las tarascadas que inevitablemente le propinarán las defensas rivales.

La carrera de Brees, un tejano de Dallas que alcanza su primera Super Bowl con 31 años de edad, ha estado marcada por los altibajos constantes. Siempre se ha quedado a un pasito de la gloria ya desde la universidad. Apenas gozó de protagonismo durante sus dos primeros años, pero en los dos siguientes las lesiones de compañeros le abrieron las puertas para que explotara sus cualidades, hasta que una lesión a finales de 2005 frenó su ímpetu, coincidiendo con el final de su contrato con los Chargers. San Diego le ofreció la renovación muy condicionada, con un salario base bajo y con un montón de dinero en incentivos, cosa que Brees se tomó como una falta de confianza, decidiendo largarse y aceptando la oferta de New Orleans, equipo con el que debutó en 2006.

Brees y los Saints han ido creciendo juntos en estas cuatro temporadas, adaptándose el uno a los otros y viceversa. New Orleans permaneció invicto durante los 11 primeros partidos de la temporada regular, en buena medida gracias al acierto de Drew, que logró el récord de la NFL en porcentaje de pases completados en una temporada (70,62%).

Alérgico a la leche, al huevo y al gluten, y en consecuencia restringido a una dieta muy específica exenta de este tipo de alimentos, Drew Brees es fácilmente reconocible por una mancha de nacimiento den su pómulo derecho. Su presencia es habitual en obras y actos de beneficencia, y fue especialmente visible cuando el huracán Katrina asoló la ciudad de sufranquicia.

Instituciones