Cada vez se consumen más aperitivos, y la tendencia es intentar que no sumen excesivas calorías, como los que se viene consumiendo hasta ahora. En esta línea, uno de los snacks que están marcando tendencia es el Edamame, un tentempié bajo en calorías, libre de gluten y colesterol y que además es fuente de hierro, calcio y proteínas.

Se trata de una preparación culinaria con nombre japonés, pero que en realidad son judías de soja inmaduras, que se comen hervidas en agua con sal y que se sirven enteras.

De esta manera, estaríamos hablando de la traslación de un aperitivo oriental tradicional nipón a la cocina internacional.

Estamos ante un producto tierno, pueden consumirse tanto desgranado como con vaina, y que al ser muy parecido a las judías, podría llegar a ser el aperitivo del presente y del futuro, ya que los expertos aseguran que son mejores para la salud que los frutos secos, o que cualquier otro snack que pueda resultar saludable.

La primera referencia que se encuentra de este alimento data del año 1275, cuando un monje budista japonés daba las gracias a sus fieles por haber llevado edamame a su templo. El nombre, que fue registrado como tal en el diccionario de lengua inglesa de Oxford en 2003, puede traducirse como «tallo grande», y no son sino judías de soja verdes que se recogen antes de su maduración.

Se pueden comer frescas, como aperitivo saludable, pero lo más habitual es cocinarlas en agua o al vapor, añadiéndolas sal.

Normalmente se puede encontrar congelado, lo que no va en detrimento de su calidad, y recuerdan un poco al sabor de la mantequilla dulce, pero mucho más saludable y con numerosos valores nutricionales.

Entre su beneficios para la salud, destacan que inhibe los episodios depresivos, incide en la prevención de la arteriosclerosis y en la regulación de la presión sanguínea y quienes consumen soja se ven menos afectados por trastornos cerebrales relacionados con la edad avanzada.

A la hora de cocinar las vainas, lo primero es hervirlas y simplemente añadirles un poco de sal, aunque también están muy ricas salteadas o al vapor. La única precaución que hay que tomar es que siempre hay que cocinarlas pues la soja cruda, puede ser venenosa.

Se pueden añadir a alguna receta, como el poke o agregar a las ensaladas, y con la quinoa forma una perfecta pareja. En cualquier caso, es muy fácil de preparar y la forma más extendida de comerlo es hervido en abundante agua con sal durante cinco minutos: se deja enfriar y se sazonan con escamas de sal.

Se gtrata de una legumbre muy versátil que en Japón se consume como postre, pero también se puede consumir como guarnición de una carne o pescado, acompañando al arroz y a los fideos orientales...

Los países que más lo consumen, además de Japón, son Corea y Taiwán, aunque por supuesto se ha incorporado a la cocina española, como si de las típicas judías con jamón o un buen plato de huevos a la flamenca se tratara.

Con todo, de este alimento destaca, además de que no contiene gluten, lo cual le convierte en perfecto para los celíacos, que es un producto con muchos beneficios, como un contenido en fibra, además de ser fuente de hierro, calcio, fósforo y magnesio, aportar vitamina K, C y B y ser rico en ácido fólico.