Algunos expertos estudian la relación de la celiaquía con la psoriasis, llegando a la conclusión de que podrían guardar cierta relación, aunque no en todos los casos... de esta manera, un grupo de investigadores de la National Psoriasis Foundation señalaron en su día que numerosos pacientes con psoriasis podrían ser también celiacos, además de que esta última enfermedad podría mejorar con la dieta sin gluten.
La psoriasis es una afección de la piel que provoca irritación y enrojecimiento, llegando a provocar costras denominadas escamas, y es normal común que se manifieste en la edad adulta, teniendo parecida prevalencia en hombres que en mujeres. Su mecanismo de desarrollo está relacionado con la velocidad a la que se regeneran las células de la piel, ya que normalmente las células cutáneas crecen en lo profundo de la piel y suben hasta la superficie más o menos una vez al mes.
En las personas con psoriasis este proceso es más rápido, por lo que las células cutáneas muertas se acumulan en la superficie de la piel provocando irritación, enrojecimiento y escamas.
De esta manera, los especialistas apuntan que la psoriasis es un proceso de carácter autoinmune como origen de la enfermedad, una característica que comparte con la celiaquía, motivo por el que algunos estudios señalan una relación entre ambas enfermedades, aunque no en todos los casos.
Los primeros estudios se remontan a 1993, cuando en la Universidad de Uppsala (Suecia) un frupo de investigadores concluyeron que un 16 % de pacientes con psoriasis había incrementado sus anticuerpos de gliadina, un anticuerpos que en niveles elevados es indicador de padecer celiaquía.
Posteriormente, esta misma uuniversidad sueca realizó un estudio con pacientes con psoriasis a los que se les sometió a dieta sin gluten, mientras que otros lo siguieron tomando con gluten en sus comidas, dando como resultado tras tres meses, que la psoriasis de los pacientes que habían realizado la dieta sin gluten había mejorado mientras que no lo había hecho la de aquellos que no la realizaron. Lo curioso es que cuando los pacientes volvieron a sus hábitos alimenticios, la psoriasis empeoró en más de la mitad de los que habían notado mejoría.
Aunque la relación no está del todo clara, la psoriasis se sitúa en ocasiones como una manifestación más de la enfermedad celiaca, ya que ambas patologías son de carácter autoinmune, lo que no significa que todas las personas con psoriasis sean celiacas.
En los últimos años muchos investigadores se han centrado en tratar de aclarar esta relación, como es el caso del Dr. Krueger, profesor de Dermatología de la Universidad de Utah (EE.UU), que ha detallado que "se da un incremento en la frecuencia de la enfermedad celiaca entre las personas con psoriasis", y ha advertido que "celiaquía y psoriasis son enfermedades autoinmunes y se cree que ambas podrían ser originadas por células hiperactivas o activadas inapropiadamente, en el intestino en el caso de la celiaquía y en la piel en caso de la psoriasis".
Posteriormente, un estudio realizado por investigadores italianos analizó un total de 218 pacientes pacientes con psoriasis y 264 sujetos de control, dando como resultado que el 4,1 % de los pacientes con psoriasis tenían también anticuerpos de trasnglutaminasa elevados, mientras que sólo 1 paciente del grupo de control elevó estos anticuerpos relacionados con la celiaquía.
El estudio mostró también que después de 6 meses de dieta sin gluten, la mayoría de los pacientes con psoriasis y celiaquía habían mejorado notablemente sus lesiones de la piel, pero concluyendo que se desconocen los mecanismos por los que se produce y se desarrolla esta relación.