Bajo en calorías, sin gluten ni hidratos de carbono y con efecto saciante: se trata de la pasta de Konjac, o glucomanano, una ayuda extra para adelgazar sin grandes sacrificios y apta para celíacos.

El secreto de esta pasta reside en que apenas aporta 7 calorías por cada cien gramos al estar elaborada únicamente con harina de glucomanano, al cual se le atribuyen efectos adelgazantes. Fácil de preparar, incluirla en la dieta es una nueva forma de comer pasta, sobre todo para los celíacos que tantas dificultades tienen para hacerlo.

El konjac es una planta que se cultiva fundamentalmente en el sureste asiático. De la raíz es de donde se obtiene el glucomanano y la harina con al que se elabora la pasta. El glucomanano es una fibra soluble de origen vegetal que se ha convertido en un buen complemento de las dietas de adelgazamiento, con el beneficio añadido de que aumenta la sensación de saciedad, lo que nos hará comer menos y controlar mejor el apetito entre horas.

También se la considera un buen remedio para prevenir el estreñimiento y para favorecer la eliminación de toxinas. La fibra, esencial en cualquier dieta equilibrada, ayuda a regular los niveles de colesterol y de triglicéridos.

Diversos estudios además han apuntado a que los efectos beneficios de esta fibra en el control de los niveles de glucosa en sangre.

La pasta de Kojac, de textura similar a los espaguetis (también se conoce como fideos shiratakis), es fácil de preparar, y se puede tomar acompañada de verduras (tomates, zanahorias…). Se puede incluir como un primer plato que apenas nos aportará calorías y que nos hará comer menos del resto de alimentos.

Al no contener gluten es ideal en las dietas de celíacos, pero también es un alimento apto para diabéticos, veganos y vegetarianos.