Hace unos meses David Ferreira dejó su puesto de trabajo en Madrid, vendió su casa y regresó a Pontevedra junto a su mujer Paula Veiga. El hecho de que ella sea celíaca fue una señal para plantearse nuevos proyectos, y tras nueve meses de obras, acaban de poner en marcha la primera panadería de productos sin gluten de la ciudad.
Así es como nació Daula Bakery, el único obrador que elabora exclusivamente pan y pastelería sin gluten en Pontevedra, al frente del cual están David y Paula, además de Carla Rivadulla y Nuria Montes, dos panaderas que acabaron su preparación en la escuela de hostelería Carlos Oroza y trabajan cada día en mejorar el producto.
«Aquí están todos mis ahorros, pero sentimos que la acogida está siendo bestial, muchos de los que entran, nos dicen ‘por fin’», ha contado David al diario La Voz de Galicia, trás de un mostrador al que ya está adaptado; al tiempo que reconoce que no le costó dar el paso para un cambio de vida. «En la publicidad es todo para ya, para ayer, en su momento era un buen publicista, pero ya tenía ganas de cambio. Estoy feliz», explica.
Daula es el resultado de unir los nombres David y Paula. «Queríamos un nombre que no existiese, algo que nos posicionase bien en los buscadores», explica Ferreira, que barajó otros nombres como Peter Pan o Miga sana, pero acabó dejándolos en el cajón.
Ya ha empezado a tener los primeros contactos con otros negocios de la ciudad especializados en productos sin gluten, ya que «estamos viendo cuál es nuestra capacidad de producción y nuestra demanda de pan», apunta David, que ya tiene planes a medio plazo.
Por ahora las estanterías de su local solo tienen dulces, pero en los próximos días empezará a vender pizzas y empanadas, la otra gran petición de quienes se acercan hasta Daula.
«Es un reto, estuve preparando recetas con mi profesor de panadería Manuel Patiño y cada día hacemos las cosas mejor», ha explicado Carla Rivadulla, que hace cinco años fue subcampeona gallega de panadería. Y es que David Ferreira suplió la falta de conocimientos técnicos rodeándose de profesionales.
El servicio a domicilio está en el primer punto de sus prioridades. «Nos han preguntado desde Vigo si podemos servir allí», apunta David Ferreira, que está en el momento más dulce de esta nueva etapa.