Los celíacos deben controlar muy bien lo que comen, pero también todo lo que se llevan a la boca, desde la pasta de dientes hasta tenedores o toallas. Los pintalabios y las barras labiales entran en esta categoría.

“A diferencia del resto de cosméticos, los que se aplican en los labios tienen una posibilidad de ingesta muchísimo mayor”, ha explicado José Luis Rodríguez, consejero delegado de Celicity. De hecho, según un estudio publicado por dicho portal, aunque los besos, bordes de vasos o servilletas se llevan parte del producto, el 80 % del pintalabios aplicado es ingerido involuntariamente cuando los labios están en contacto con la lengua.

El informe de Celicity estima que una mujer consume una media de entre 1,5 y 2,7 kilos de barra labial a lo largo de su vida, pudiendo alcanzar los cuatro kilos si el uso es diario y recurrente. Se trata de un dato intrascendente para la mayoría de la población, pero es muy relevante para la comunidad de celíacos, cuyo nivel de tolerancia al gluten es variable.

Tras solicitar información a 40 marcas, las conclusiones del estudio determinan que solo el 40 % de ellas producen artículos totalmente libres de gluten y de trazas. “Uno de los mayores riesgos para los celiacos es la contaminación cruzada”, ha explicado Rodríguez a propósito de las trazas.

“Un restaurante, por ejemplo, puede usar materia prima 100% libre de gluten, aceite apto y sartenes también limpiadas a conciencia. Pero solo con que en la otra punta de la cocina se esté manipulando harina ya queda todo contaminado”, advierte el especialista.

Según el informe, las marcas de pintalabios totalmente aptas para quienes padezcan celiaquía, y que no utilizan gluten en ninguna de sus composiciones, ni extractos que podrían estar contaminados, son Benecos, Maybelline, Shiseido y Deliplus, de Mercadona.

En un segundo escalón se colocan las marcas catalogadas como “muy probablemente aptas para celiacos”, es decir, las que no incorporan gluten, pero si podrían tener trazas. En este capítulo están marcas como The Body Shop y Sante. Dentro de la gama alta (entre 15 y 30 euros) entrarían Dior, Chanel y Benefit.

Pero quizás más interesante es conocer los productos cosméticos que si contienen gluten y hay que evitar a toda costa. En este sentido, la lista negra está integrada por pintalabios de las marcas Estée Lauder, en cuya composición se incluyen cereales, y sus submarcas Mac y Clinique. Por su parte, se gún el informe, L’Oréal, Lancôme y Helena Rubinstein “no utilizan cereales con gluten en ninguna de sus composiciones, pero sí otros extractos vegetales que podrían estar contaminados”.

Y por último, el grupo Coty, que incluye Max Factor, Bourjois y Rimmel London, “confirmaron el uso de otros productos de origen vegetal que podrían haber estado en contacto con gluten”, aseguran desde Celicity.